La lactancia materna y la salud oral del bebé van estrechamente ligadas. Dar el pecho ha demostrado tener innumerables beneficios tanto para la madre como para el bebé. Muchas personas saben que protege contra las alergias y el eczema, reduce el riesgo de virus y ciertas infecciones e incluso puede disminuir la amenaza de SMSL. Pero, ¿sabía que la lactancia también puede afectar la salud bucal de su bebé? Y lo hace de la siguiente manera:
La leche materna proporciona a los niños los nutrientes esenciales que necesitan para crecer y prosperar. Cada uno de estos nutrientes es importante para mantener las encías y los dientes sanos, una vez que erupcionan. La leche materna contiene ácidos grasos que reducen la inflamación, proteínas que ayudan a fortalecer los músculos de la mandíbula y las vitaminas necesarias para una buena salud oral en general.
En un estudio reciente, los investigadores descubrieron que los bebés que fueron amamantados exclusivamente durante los primeros seis meses de su vida tenían un 72 % menos de probabilidades de desarrollar dientes torcidos. Esto se debe principalmente al mecanismo de succión que difiere entre los bebés amamantados y los alimentados con biberón. La lactancia materna estimula los músculos faciales inferiores que ayudan a tonificar y fortalecer la mandíbula. Esto puede reducir el riesgo de alineación de la mordida a medida que el niño crece.
Si bien cualquier niño puede sufrir caries, los bebés alimentados con biberón tienen más probabilidades de desarrollar caries. La caries del biberón puede ocurrir debido a la exposición frecuente y prolongada de los dientes de un bebé a bebidas que contienen azúcar; por ejemplo, cuando se pone a dormir a un bebé con un biberón. La lactancia materna minimiza el riesgo de caries del biberón, ya que la mayoría de los bebés que amamantan no suelen estar expuestos a la leche durante un período tan prolongado como los bebés alimentados con biberón.
La lactancia materna también puede prevenir las caries de otras maneras. La leche materna contiene anticuerpos que ayudan a luchar contra las bacterias dañinas en la boca. Este efecto antibiótico de los anticuerpos ayuda a contrarrestar el efecto de la caries dental para ayudar a los niños a mantener una sonrisa saludable. Esto es especialmente importante para los niños que tienen ciertos defectos genéticos o condiciones de salud que provocan que el esmalte se debilite, haciéndolos más propensos a las caries.
Muchos especialistas en odontopediatría recomiendan comenzar con una buena higiene bucal incluso antes de que aparezca el primer diente de su bebé. Si bien es posible que no pueda ver los dientes de su pequeño, están allí. De hecho, los dientes comienzan a formarse ya en el segundo trimestre del embarazo. La mayoría de los bebés tendrán 20 dientes de leche cuando nazcan, algunos de los cuales están completamente desarrollados en la mandíbula. Descubra cuándo le saldrán los dientes de leche a su bebé.
Para ayudar a cuidar la sonrisa de su hijo, siga estos sencillos consejos:
Si bien la salud de su bebé es su primera prioridad, también es importante la propia salud de la madre. La maternidad es una gran responsabilidad, pero no debe descuidar su propia salud, incluida la salud bucal. Si tiene más dudas sobre la importancia de la lactancia materna y la salud oral de su bebé consulte a nuestra odontopediatra, la Dra. Dª Gema Mazarro Bodega.
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